A la hora de hablar de glamour, de lujo, de elegancia y sobre todo de estilismo, solo puede haber una firma representativa que cumpla estos requisitos. La prestigiosa firma Dior, es una de las marcas más glamorosas del mercado, desde que su fundador, Christian Dior le diera la vida en el año 1946, se ha convertido en una de las marcas de lujo más representativas, conocida en los años 40 como el "New Look".
La casa Dior no sólo crea vestidos y trajes de ensueño y alta costura, sino que también, con el paso de los años, ha creado su propia colección de joyas, exclusivas y únicas hechas para la mujer de hoy.
La sucesora de Christian para esta innovadora colección de joyas es Victoire de Castellane, directora creativa de Dior, quien ha logrado hacer de la joyería conservadora un arte moderno. La colección es de lo más atrevida, con formas imposibles, colores llamativos y modernos, combinaciones únicas y ante todo elegantes y sofisticadas. Desde anillos con predominancia de oro y piedras preciosas como los zafiros multicolores, pasando por colgantes con toques históricos, brazaletes y pendientes con una frescura moderna y juvenil, pensada para momentos no tan convencionales.
De la alta joyería de la que Dior es característica, pasamos a la innovación del momento con respecto a esta marca, pues la firma ha lanzado al mercado una nueva colección de relojes. Los relojes
Christian Dior son el resultado de una fusión entre los inicios conservadores de la firma con la exclusividad y armonía del siglo XXI, relojes cuyas formas y diseños se adaptan al hombre y a la mujer de hoy, dándoles esa esencia y ese lujo de la que Dior goza desde los años 40, relojes de lujo elaborados con materiales de alta y primerísima calidad, (tales como oro, acero y plata) y montados pieza a pieza por maquinaria suiza.
Joyas y relojes de ensueño por los que los años no pasan en ellos, una firma perdurable en el tiempo.
